La extinción del oso pardo está cada vez más lejos, según las últimas imágenes del fondo para la protección de los animales salvajes, el FAPAS, ya que se ha pasado de una hembra a 5 en la zona de Proaza.
Las cámaras del FAPAS nos brindan imágenes sobre la vida diaria de estos ejemplares y podemos ver que se encuentran en perfectas condiciones.
Podemos ver su agilidad para obtener cerezas o miel y ver como comparten bebederos con la fauna doméstica, por lo que podemos decir que esta especie en peligro de extinción da un paso hacia su salvación.
Pero, sin embargo el FAPAS alerta porque la población la occidental evoluciona pero la oriental sigue límite por lo que los planes de conservación no han logrado su objetivo.
que chido