La rana de Gardiner o conocida como rana de Seychelles por ser nativa de esta isla, es una de las ranas más pequeñas que existen, midiendo solamente 11 milímetros de longitud.
El color que presenta es desde el marrón al verde, teniendo una distintiva banda oscura que va desde la boca, pasando por debajo del ojo hasta las patas traseras. Las extremidades delanteras son pequeñas, mientras que las extremidades traseras son musculosas y largas.
Esta especie está clasificada en la Lista Roja de la UICN como “en peligro”.
Las amenazas que acechan a esta especie son: la extracción de madera, la labranza de tierras para la agricultura, los asentamientos humanos y el turismo. La gran mayoría de los bosques de tierras bajas fueron destruidos o perturbados; y las plantaciones de vainilla, canela y coco ahora ocupan la mayor parte de las mesetas costeras. La perdida del hábitat contribuyo a la disminución del número de las ranas de Gardiner en los últimos años.